PUERTO PRINCIPE.- Miles de personas se manifestaron el jueves en las calles de Puerto Príncipe y de la segunda ciudad de Haití, Cabo Haitiano, contra el hambre y el desempleo, y para reclamar la dimisión del presidente Michel Martelly.
En la capital, jefes de partidos políticos y parlamentarios de la oposición participaron en la protesta, que fue dispersada a unos metros del palacio presidencial, donde se encontraba desplegada la policía.
Se escucharon tiros de armas de fuego y la policía lanzó bombas lacrimógenas cuando jóvenes manifestantes trataron de forzar las barreras de seguridad instaladas por los cuerpos de seguridad.
Previamente, los manifestantes corearon eslóganes contra el gobierno reclamando la renuncia del presidente y su gabinete. “La población vive en la miseria. La corrupción y el hambre aumentan en todo el país, Martelly debe irse”, gritaban los manifestantes, la gran mayoría de los cuales eran jóvenes de barrios pobres de Puerto Príncipe. En Cabo Haitiano, en el norte del país, miles de personas salieron también a las calles con platos y cubiertos encima de sus cabezas.
“El pueblo quiere trabajo y quiere vivir con dignidad”, cantaron los manifestantes, que acusan al poder de repartir humillantes platos de comida a los haitianos.
“Denunciamos la persecución política que practica este gobierno. Permaneceremos movilizados hasta el final”, exclamó el joven abogado André Michel, furioso opositor del gobierno. Miles de personas participaron en la protesta, marchando por las calles de Puerto Príncipe para quejarse mayormente sobre el alto costo de la vida.
Fue una de las mayores manifestaciones contra el gobierno del presidente Michel Martelly este año, y consistió mayormente de partidarios del ex presidente Jean-Bertrand Aristide y legisladores opositores. La marcha comenzó pacíficamente, pero terminó cuando los manifestantes se acercaban al área del palacio presidencial. La policía hizo disparos de advertencia y lanzó gas lacrimógeno y un grupo pequeño de manifestantes prendió fuego a barricadas de neumáticos.
En la capital, jefes de partidos políticos y parlamentarios de la oposición participaron en la protesta, que fue dispersada a unos metros del palacio presidencial, donde se encontraba desplegada la policía.
Se escucharon tiros de armas de fuego y la policía lanzó bombas lacrimógenas cuando jóvenes manifestantes trataron de forzar las barreras de seguridad instaladas por los cuerpos de seguridad.
Previamente, los manifestantes corearon eslóganes contra el gobierno reclamando la renuncia del presidente y su gabinete. “La población vive en la miseria. La corrupción y el hambre aumentan en todo el país, Martelly debe irse”, gritaban los manifestantes, la gran mayoría de los cuales eran jóvenes de barrios pobres de Puerto Príncipe. En Cabo Haitiano, en el norte del país, miles de personas salieron también a las calles con platos y cubiertos encima de sus cabezas.
“El pueblo quiere trabajo y quiere vivir con dignidad”, cantaron los manifestantes, que acusan al poder de repartir humillantes platos de comida a los haitianos.
“Denunciamos la persecución política que practica este gobierno. Permaneceremos movilizados hasta el final”, exclamó el joven abogado André Michel, furioso opositor del gobierno. Miles de personas participaron en la protesta, marchando por las calles de Puerto Príncipe para quejarse mayormente sobre el alto costo de la vida.
Fue una de las mayores manifestaciones contra el gobierno del presidente Michel Martelly este año, y consistió mayormente de partidarios del ex presidente Jean-Bertrand Aristide y legisladores opositores. La marcha comenzó pacíficamente, pero terminó cuando los manifestantes se acercaban al área del palacio presidencial. La policía hizo disparos de advertencia y lanzó gas lacrimógeno y un grupo pequeño de manifestantes prendió fuego a barricadas de neumáticos.
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