Este año los altos precios de los libros y demás artículos escolares ha sido un dolor de cabeza para los miles de padres de familia de clase media alta que se han encontrado con esta “sorpresa” de subida de precios, al iniciarse este lunes el próximo año escolar 2013-2014.
Ante esta situación, el presidente de la Cámara de Diputados, Abel Martínez, se pronunció al respecto el pasado viernes 16, en el inicio de la nueva legislatura, catalogando como “un abuso aberrante” los altos precios registrados nueva vez en los libros de texto.
Durante su discurso, adelantó que elaborarán un proyecto para regular sus ventas y afirmó que si en ese negocio existe una mafia debe terminar, porque no se puede estar jugando con el pan de la enseñanza de los niños y el bolsillo de los padres.
Cierto que muchos vendedores se están aprovechando de la circunstancia para abusar de los compradores que luchan por obtener los textos de sus hijos en este inicio de clase, ya que cuando preguntan por un libro de matemática o de lenguas española, materias que son básicas en el pensum estudiantil, les dicen que los precios están entre RD$700 a RD$3,000.
Los establecimientos comerciales estuvieron los últimos días abarrotados de clientes buscando los útiles escolares indispensables para ser usados por los escolares en las escuelas públicas y colegios privados.
Periodistas de El Nuevo Diario visitaron diferentes almacenes en las arterias comerciales del Distrito Nacional y la provincia Santo Domingo, donde comprobaron que los libros escolares mantienen altos precios.
El señor Feliz Antonio Santana conversó con esta reportera y le manifestó su inconformidad por los precios que tienen los textos este año.
“Yo me siento mal con esta situación, tengo tres hijos que estudian, y quiero ayudarlos para que se hagan profesionales, pero me está costando mucho, porque los precios de los libros están muy caros, el de matemática de 8vo grado, me sale en RD$1,300, y uno de Lengua Española en RD$975, eso es un abuso”
María Tiburcio, de su lado, dijo: “Yo pregunté por dos libros, de 1ro y otro de 3ro del bachillerato, que son los cursos en que están mi nietos, y se van entre los dos RD$1,690, y solamente tengo RD$975, esto está muy difícil”.
No obstante a esta situación, muchos padres de familias recurren a los libros usados, pero se han encontrado que los mismos se comparan en precio a los que son nuevos, ya que cuando preguntan por el costo de uno usado, la diferencia es de RD$250, por lo que afirmaron que prefieren comprarlo nuevo.
De su lado, la joven Yokasta Pimentel, residente en el sector San Carlos, cursa el 8vo grado, quien manifestó que los libros tiene que comprarlos nuevos porque tiene que usar un contenido adicional de práctica, y si lo compra usado no trae el cuadernillo de la tarea.
La señora Matilde Perdomo también se quejó de que los libros que dejaban dos de sus hijos ella los cambiaban por otros del año siguiente y daba dinero de diferencia, pero que ahora no puede hacerlo por el alto costo de los mismos.
“Yo fui a cambiarlos y el vendedor me dijo que la diferencia en dinero era muy alta, que me convenía comprarlos nuevos y ahora no tengo el suficiente dinero para comprarlos y no sé qué voy hacer”, manifestó.
De su lado, varios vendedores explicaron que los precios dependen del año de impresión del libro, del curso que vaya a cursar el estudiante y del nivel de deterioro que presente la obra.
A todo eso está el inconveniente también de que los textos escolares no aparecen fácilmente en las librerías o tiendas, sino que los padres de familia tienen que dedicar varios días buscándolos y tratar de conseguirlos a buenos precios.
Iris Reyes, quien tiene cuatros niños, explicó que “son tantos libros y la demanda se ha incrementado en los últimos días, en algunos puestos se agotan y hay que visitar varios puestos para encontrarlos”.
Ante esta situación, el presidente de la Cámara de Diputados, Abel Martínez, se pronunció al respecto el pasado viernes 16, en el inicio de la nueva legislatura, catalogando como “un abuso aberrante” los altos precios registrados nueva vez en los libros de texto.
Durante su discurso, adelantó que elaborarán un proyecto para regular sus ventas y afirmó que si en ese negocio existe una mafia debe terminar, porque no se puede estar jugando con el pan de la enseñanza de los niños y el bolsillo de los padres.
Cierto que muchos vendedores se están aprovechando de la circunstancia para abusar de los compradores que luchan por obtener los textos de sus hijos en este inicio de clase, ya que cuando preguntan por un libro de matemática o de lenguas española, materias que son básicas en el pensum estudiantil, les dicen que los precios están entre RD$700 a RD$3,000.
Los establecimientos comerciales estuvieron los últimos días abarrotados de clientes buscando los útiles escolares indispensables para ser usados por los escolares en las escuelas públicas y colegios privados.
Periodistas de El Nuevo Diario visitaron diferentes almacenes en las arterias comerciales del Distrito Nacional y la provincia Santo Domingo, donde comprobaron que los libros escolares mantienen altos precios.
El señor Feliz Antonio Santana conversó con esta reportera y le manifestó su inconformidad por los precios que tienen los textos este año.
“Yo me siento mal con esta situación, tengo tres hijos que estudian, y quiero ayudarlos para que se hagan profesionales, pero me está costando mucho, porque los precios de los libros están muy caros, el de matemática de 8vo grado, me sale en RD$1,300, y uno de Lengua Española en RD$975, eso es un abuso”
María Tiburcio, de su lado, dijo: “Yo pregunté por dos libros, de 1ro y otro de 3ro del bachillerato, que son los cursos en que están mi nietos, y se van entre los dos RD$1,690, y solamente tengo RD$975, esto está muy difícil”.
No obstante a esta situación, muchos padres de familias recurren a los libros usados, pero se han encontrado que los mismos se comparan en precio a los que son nuevos, ya que cuando preguntan por el costo de uno usado, la diferencia es de RD$250, por lo que afirmaron que prefieren comprarlo nuevo.
De su lado, la joven Yokasta Pimentel, residente en el sector San Carlos, cursa el 8vo grado, quien manifestó que los libros tiene que comprarlos nuevos porque tiene que usar un contenido adicional de práctica, y si lo compra usado no trae el cuadernillo de la tarea.
La señora Matilde Perdomo también se quejó de que los libros que dejaban dos de sus hijos ella los cambiaban por otros del año siguiente y daba dinero de diferencia, pero que ahora no puede hacerlo por el alto costo de los mismos.
“Yo fui a cambiarlos y el vendedor me dijo que la diferencia en dinero era muy alta, que me convenía comprarlos nuevos y ahora no tengo el suficiente dinero para comprarlos y no sé qué voy hacer”, manifestó.
De su lado, varios vendedores explicaron que los precios dependen del año de impresión del libro, del curso que vaya a cursar el estudiante y del nivel de deterioro que presente la obra.
A todo eso está el inconveniente también de que los textos escolares no aparecen fácilmente en las librerías o tiendas, sino que los padres de familia tienen que dedicar varios días buscándolos y tratar de conseguirlos a buenos precios.
Iris Reyes, quien tiene cuatros niños, explicó que “son tantos libros y la demanda se ha incrementado en los últimos días, en algunos puestos se agotan y hay que visitar varios puestos para encontrarlos”.
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