El consumo de heroína se acerca al de marihuana entre las drogas más consumidas en el país, según estableció Leopoldo Díaz, presidente de Hogar Crea Dominicana, luego de conocer los resultados de un estudio que sitúa entre 800 y 1,900 la cantidad de usuarios de esta droga en República Dominicana.
Díaz dijo que la mayor preocupación que tienen las instituciones que trabajan con prevención y tratamiento, es precisamente el aumento en el consumo de heroína. "Estadísticas nuestras indican que a partir de los últimos diez años ha ido creciendo (el consumo), ocupando lugares importantes, prácticamente está discutiendo con la marihuana, en el tercer lugar", expresó.
La droga más consumida en el país es el crack, seguida por la cocaína; en tercer lugar la marihuna, y en un espacio muy cercano, la heroína.
¿Pero cuál es el problema con esta droga? La heroína es un derivado de la morfina, y es altamente adictiva, porque al administrarse mayormente por las venas, entra en contacto casi inmediato con el sistema nervioso central.
"La heroína tiene dos problemas, la dependencia física, que provoca el síndrome de abstinencia o 'mono', que son los trastornos fisiológicos en el individuo, y le crea un incremento en la utilizaciónde la sustancia para disminuir la presencia de la sintomatología, y en segundo lugar, universalmente está demostrado que es la que genera violencia y criminalidad, por su alto costo. El usuario de heroína es un individuo que, de hecho está incapacitado para el mercado laboral, la droga es cara, por lo que tiene que buscar recursos a como dé lugar", manifiestó Díaz.
Al suministrarse mayormente inyectada, sus usuarios están más expuestos a contraer enfermedades de transmisión como VIH y hepatitis, debido a que muchos usan la misma jeringa. En el estudio realizado en el país por la Comisión Interamericana para el Control de Drogas (CICAD) y el Consejo Nacional de Drogas, un 6.2% de los entrevistados confesó haber dado positivo al VIH, lo que significa una proporción alta. Un 3% dio positivo al hepatitis B y un 15% al tipo C. El estudio captó adictos en tratamiento de rehabilitación, en las calles, y en las cárceles.
De los que estaban en las calles un 81% dijo que había sido arrestado alguna vez. Por los efectos fisiológicos que provoca en el organismo la abstinencia a esta sustancia, la desintoxicación del individuo requiere de un proceso previo, vigilado por expertos. De hecho, de los que participaron en el estudio 76% admitió que ha estado sometido a tratamientos alguna vez, pero lo dejan por el "mono".
Díaz dijo que la mayor preocupación que tienen las instituciones que trabajan con prevención y tratamiento, es precisamente el aumento en el consumo de heroína. "Estadísticas nuestras indican que a partir de los últimos diez años ha ido creciendo (el consumo), ocupando lugares importantes, prácticamente está discutiendo con la marihuana, en el tercer lugar", expresó.
La droga más consumida en el país es el crack, seguida por la cocaína; en tercer lugar la marihuna, y en un espacio muy cercano, la heroína.
¿Pero cuál es el problema con esta droga? La heroína es un derivado de la morfina, y es altamente adictiva, porque al administrarse mayormente por las venas, entra en contacto casi inmediato con el sistema nervioso central.
"La heroína tiene dos problemas, la dependencia física, que provoca el síndrome de abstinencia o 'mono', que son los trastornos fisiológicos en el individuo, y le crea un incremento en la utilizaciónde la sustancia para disminuir la presencia de la sintomatología, y en segundo lugar, universalmente está demostrado que es la que genera violencia y criminalidad, por su alto costo. El usuario de heroína es un individuo que, de hecho está incapacitado para el mercado laboral, la droga es cara, por lo que tiene que buscar recursos a como dé lugar", manifiestó Díaz.
Al suministrarse mayormente inyectada, sus usuarios están más expuestos a contraer enfermedades de transmisión como VIH y hepatitis, debido a que muchos usan la misma jeringa. En el estudio realizado en el país por la Comisión Interamericana para el Control de Drogas (CICAD) y el Consejo Nacional de Drogas, un 6.2% de los entrevistados confesó haber dado positivo al VIH, lo que significa una proporción alta. Un 3% dio positivo al hepatitis B y un 15% al tipo C. El estudio captó adictos en tratamiento de rehabilitación, en las calles, y en las cárceles.
De los que estaban en las calles un 81% dijo que había sido arrestado alguna vez. Por los efectos fisiológicos que provoca en el organismo la abstinencia a esta sustancia, la desintoxicación del individuo requiere de un proceso previo, vigilado por expertos. De hecho, de los que participaron en el estudio 76% admitió que ha estado sometido a tratamientos alguna vez, pero lo dejan por el "mono".
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